Fue Nacional el que insistió y Olimpia el que se relajó tras el segundo gol. Con mucho respeto a los nacionalófilos, quienes jugaron muy bien y el resultado puede llamarse justo por si actitud, Olimpia tendría que haberle hecho al menos 2 goles más. Porque eso exige su historia, eso es lo que queremos ver los hinchas de este grandioso club.
Queremos ver goleadas, baile, equipos aplastados por el coloso decano. No un equipo que se relaja con el gol de ventaja, no un equipo que quiere quemar segundos esperando que el partido ya terminé. Creo que más que el fracaso total que significa el dejar la Copa a esta altura (porque hay equipo para ganarla), lo que realmente tiene que apenar es mostrarle a toda Sudamérica ese nivel de juego.
Si no vemos un Olimpia arrollador en este Clausura, se terminará de consumar el fracaso llamado 2017.
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